La emoción de comenzar nuevas cosas es algo que nos encanta a todos. Nos pone en modo activo, listos para disfrutar de esa nueva actividad. A todos nos gusta comenzar cosas nuevas, una manualidad, un curso, un trabajo de jardinería, etc…

Y lo interesante es que cada cosa que comencemos llegue a buen puerto. Que lleguemos a terminarlo por completo y precisamente ahí es donde muchos encontramos la dificultad. Es por eso que hoy te traemos unas sugerencias para que podamos terminar lo que comenzamos.

Ya sea decorar un dormitorio, pintar el garaje, ordenar los armarios o cualquier otra actividad/proyecto siempre lo comenzamos con expectación e interés. Pero ¿lo terminamos?, he ahí el desafío ante nosotros, terminar lo que comenzamos.

Eligiendo nuestros proyectos

Parece que hay días en los que estamos inspirados y se nos ocurren muchas cosas que nos gustaría hacer. De repente queremos aprender un nuevo idioma o mejorar alguno que ya hablamos.

Tal vez hayamos escuchado a alguien tocar un instrumento y se nos pase por la cabeza la idea de aprender a tocar nosotros también.

También nos puede ocurrir con los negocios. Se nos ocurre un nuevo proyecto en el que podemos desarrollar nuestras habilidades de venta, o quizás uno relacionado con las tecnologías que son tendencia.

Lo mejor es tomar nota de las ideas que se nos ocurren, de los proyectos que nos gustarían llevar acabo. Y cuando ya tengamos unas cuantas ideas podemos ordenarlas. Podemos ordenarlas por importancia o por preferencia.

A la hora de hacer esta lista, debemos plantearnos hacia donde queremos dirigir nuestra vida. Si no somos nosotros los que decidimos hacia donde queremos ir, otros lo harán por nosotros.

Es decir, si estamos pensando en mejorar nuestra alimentación y llevar una vida lo más sana posible, la idea de plantar unos frutales en el jardín está dentro de esa dirección.

O si por ejemplo estamos pensando en realizar un proyecto relacionado con el mercado internacional quizás será bueno mejorar nuestro inglés.

La idea es que el nuevo proyecto encaje en nuestros deseos, nuestra trayectoria de vida.

De uno en uno

Cuando ya hemos ordenado la lista de actividades u objetivos a conseguir tendremos que decidir con cuál de ellos vamos a comenzar. Lo interesante es comenzar con una sola actividad a la vez, si comenzamos demasiadas cosas nuevas en el mismo tiempo nos costará bastante poder desarrollarlas adecuadamente.

Esto podría frustrarnos pues no obtendríamos los resultados deseados. Además, estaríamos remando en la dirección de no terminar lo que comenzamos.

Por el contrario, si comenzamos una sola cosa a la vez será mucho más fácil que llevemos a buen término el proyecto.

¿Se pueden hacer más de una cosa a la vez?

Claro que se puede, pero entonces hay que hacer un programa. Supongamos que queremos aprender a tocar un instrumento, hacer unas mejoras en el jardín y perfeccionar un idioma.

Podríamos dedicar algunas horas los sábados por la tarde al jardín, dos horas durante la semana al idioma que queremos perfeccionar y otras dos horas a la semana para aprender a tocar nuestro instrumento.

Esto es posible, pero coincidirás conmigo que requiere mucha más autodisciplina que hacer solo una actividad a la vez. Y de lo que se trata es que seamos capaces de terminar lo que comenzamos.

Por eso nuestra recomendación es hacer una sola actividad nueva a la vez. De ese modo la podremos disfrutar más, veremos los resultados más rápido y terminaremos antes con ella. Así podremos atender otro de estos objetivos que tenemos en la lista.

Aquí te dejamos con un vídeo para que puedas por fin terminar lo que comenzamos. Recuerda que debemos centrarnos en lo que deseamos lograr. El camino será complicado, pero seguro merecerá la pena.